Fashionable
Resulta que pasendo por http://pintina.blogspot.com me acordé de todos los "malos" momentos que pasé tratando de estar a la moda, y usar *lo último*.
Descubrí que entre los traumas típicos de la adolescencia, y lo que se usaba en la época que me toco transitarla, crecí con una autoestima bastante baja, considerandome un cuasi-bagayo, barril, insulsa y demás adjetivos tan glamorosos. Y también, llegué a la conclusión que si hubiese sido adolescente en los dosmil (asi se dice? yo lo fui en los noventa), no te digo que me hubiera llevado el mundo por delante, pero casi... jaja.
Acá les cuento algunas cosas:
Empecé primer año en 1990. Recuerdo que por ese año lo *más* era usar jopo. El tamaño era una cuestión cuasi falica, podriamos decir. Cuanto más alto era tu jopo, más divine estabas. El problema es que mi pelo es finiiiito y laaaaacio... y nunca logré tener un jopo de más de 1 cm. Encima al rato se me abria al medio y se me achataba.
Al tiempo empezaron las fiestas de quince. Vestidos bobos a full, de chifon, raso y no se que horribles cosas más. También pintarse tipo puerta. En este caso tampoco me veia favorecida porque ya había desarrollado un tamaño de busto importante (sería un 95 que hoy lamentablemente se transformó en un *apenaspasoel85*) y el vestido me quedaba tipo carpa. Además, tal cual como ahora, siempre aparenté unos 7 años menos (si siete!!!!, ahora nunca me dan mas de 23), así que pintada como una puerta parecía que habia estado jugando con las pinturitas de mamá.
Luego llegó el catsuit. Nada más desafortunado que esa pieza en mi cuerpo de 1.61... Y jamás se me hubiera ocurrido que contorneara mis caderas algo más que un jean...
Descubrí que entre los traumas típicos de la adolescencia, y lo que se usaba en la época que me toco transitarla, crecí con una autoestima bastante baja, considerandome un cuasi-bagayo, barril, insulsa y demás adjetivos tan glamorosos. Y también, llegué a la conclusión que si hubiese sido adolescente en los dosmil (asi se dice? yo lo fui en los noventa), no te digo que me hubiera llevado el mundo por delante, pero casi... jaja.
Acá les cuento algunas cosas:
Empecé primer año en 1990. Recuerdo que por ese año lo *más* era usar jopo. El tamaño era una cuestión cuasi falica, podriamos decir. Cuanto más alto era tu jopo, más divine estabas. El problema es que mi pelo es finiiiito y laaaaacio... y nunca logré tener un jopo de más de 1 cm. Encima al rato se me abria al medio y se me achataba.
Al tiempo empezaron las fiestas de quince. Vestidos bobos a full, de chifon, raso y no se que horribles cosas más. También pintarse tipo puerta. En este caso tampoco me veia favorecida porque ya había desarrollado un tamaño de busto importante (sería un 95 que hoy lamentablemente se transformó en un *apenaspasoel85*) y el vestido me quedaba tipo carpa. Además, tal cual como ahora, siempre aparenté unos 7 años menos (si siete!!!!, ahora nunca me dan mas de 23), así que pintada como una puerta parecía que habia estado jugando con las pinturitas de mamá.
Luego llegó el catsuit. Nada más desafortunado que esa pieza en mi cuerpo de 1.61... Y jamás se me hubiera ocurrido que contorneara mis caderas algo más que un jean...
Tipo 1993 la onda era usar todo lo que tenias en el placard en una sola salida. Así es como llegué a ponerme: remera manga larga con botoncitos desde el cuello hasta el bajo busto, arriba camisa tipo leñadora, arriba buzo con capucha, arriba sweater, y obvio campera de jean. Imaginen que si la remera era un S, la camisa ya era M, el buzo L y el sweater y la campera Xl, caso contrario era imposible calzarse una cosa sobre otra. Acompañando a esto, jean elastizado con calce hasta la cintura. Obviamente con tanta ropa, el muñeco de Michelin era desnutrido al lado mio. Y como comente antes mi altura, imaginen... parecia un taponcito con tanto trapo encima. Me acuerdo que estaba de moda una marca de jeans que traia el talle cosido abajo de la etiqueta del lado de afuera, y si no tenias el 01 o el 02, ya no era lo mismo. Jaja, ninguno de esos me pertenecia, por lo que por supuesto que le cortaba esa parte... hasta que descubri que mi hermano tenia uno que decia 02 (talle hombre), se lo corte y se lo cosí al mío... que idiota!! Pero en ese instante fui feliz.
En el momento en que la moda me empezo a favorecer (tiros más bajos, pantalones cargo, polleras a full -tengo piernas flacas-) entré a la facultad, y el estudio además de agregarme muchos conocimientos me agregó varios kilos. No miento, casi 6!!! Así que bueno, sentía que nada me quedaba lindo.
Al terminar la facu, recuperé la forma, y a fuerza de ensayo/error, descubrí que era lo que destacaba lo mejor de mí, y que era lo que disimulaba lo que no me gustaba tanto. Por supuesto con mucha ayuda de toooodo lo que se usa ahora, que en general nos queda bien a casi todas. Y para cuando me sentí diosa total, segura de mi misma, femme fatal, simpática, canchera, elegante, etc. etc. ... me encontré que ya estaba casada!!! Y no pude *disfrutar* del coqueteo por ahí.
Más allá de la anécdota, probablemente no haya sido como me veia, y el hecho de haber conquistado un hombre que realmente deseaba y convertirnos en esposos, junto con la madurez de los años que pasaron, me hayan subido el ego... O tal vez porque para el de la foto, la más linda soy yo.
NdR: No sé si escribi muchas incoherencias pero son las 2 a.m. Sepan disculpar